Cambios

 

Romper la rutina ha significado una gran constante este año.

Cuando he creido que queda tan poco por terminar algo, lo cierto es que llega una situación o me he visto envuelto bajo nuevas circunstancias que rompen el esquema y, como ahora, me dejan medio tristón.

Se supone que los cambios son buenos, pero lo cierto es que aunque sean buenos y se note que lo que viene será algo mejor, tienen que doler, doler y hacerte sentir ese nudo en la garganta bien apretado para que cuando te acuerdes de lo que hiciste para cambiar en lo que estás ahora, valga realmente la pena. Entonces, tenemos que la pena y la nostalgia son una sensación extraña, no muy agradable, pero dan cuenta de algo que quisiste, que le tuviste cariño y que volverías a pasar por lo mismo solo por el hecho de poder recordarlo y mantenerlo presente en tu vida.

Las cosas no son siempre lo que parecen y es una tarea  personal el poder hacer que se encuentren a tu favor...

Tareas cotidianas:

Agradecer todas las oportunidades que se me han dado

Terminar efectivamente la carrera

No dejar de sonreir

Pasar tiempo con quienes quiero

*La más importante de todas: ser feliz